Interesante
panorama político el que se abre hoy en España, un país que lleva casi 38 años de
democracia y donde el tradicional sistema bipartidista encabezado por el
Partido Popular (PP) y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) es
amenazado por un colectivo ciudadano que surgió de manera espontánea a
consecuencia de la crisis económica, el descredito de su clase política, la corrupción y el
desempleo. Así, el partido de los indignados denominado “Podemos” ha logrado
gran protagonismo y respaldo ciudadano. Su líder Pablo Iglesias, es un joven profesor universitario
de la Universidad Complutense de Madrid quien ha logrado catapultar al
partido a un futuro escenario presidencial donde las encuestas (hasta el momento) le son favorables. Su principal mérito ha sido canalizar el
malestar y decepción del pueblo español por su clase política tradicional.
El carismático
secretario general Pablo Iglesias ha delineado su tendencia política hacia la izquierda
progresista, dejando entrever la necesidad de reestructurar las deudas externas
de los países con dificultades económicas, mostrándose en contra de austeridad y en relación al conflicto Madrid - Cataluña está a favor de la
consulta popular independentista. Estas arriesgadas opiniones ha encendido
todas las alarmas del parlamento español, más aun considerando que el 2015 habrán
elecciones parlamentarias.